Sugimoto, Shiraishi y Ashirpa consiguen entrar a la celda del hombre sin rostro, pero en cuanto la joven aynu cruza la mirada con él y este empieza a gritar, se dan cuenta de que les tendieron una trampa. Entrar fue “fácil”, pero ahora deben salir y enfrentarse al ejército personal de Inudo y a una séptima división a la que nadie esperaba y que está dispuesta a arrasar con todo lo que se cruce en su camino…
Una noche de duelos a muerte, traiciones y pérdidas de la que nadie saldrá ileso. ¡El rumbo de nuestros protagonistas está a punto de cambiar!