Shiraishi es capturado por miembros de la séptima división, que se lo llevan a su cuartel general en Asahikawa. Viendo que tras la muerte de Choan Kumagishi no van a poder distinguir los tatuajes falsos de los auténticos, el grupo de Sugimoto decide rescatar a Shiraishi para que los ayude a entrar en contacto con el hombre sin rostro, preso en Abashiri.