La dinámica entre ambos protagonistas se intensifica mientras Nagatoro continúa provocando a Senpai, pero también se muestran momentos más suaves, donde se revela preocupación y afecto de ambos lados.
La trama se centra en cómo ambos personajes empiezan a reconocer sus sentimientos, a pesar de la actitud desafiante de Nagatoro. Además, se incluyen escenas con los amigos de Nagatoro y Senpai, aportando más momentos cómicos y tiernos que ayudan a avanzar en la evolución de la relación entre los personajes.
La historia sigue siendo divertida, pero con un toque emocional que va sumando a la conexión entre los dos.