Poco a poco, Musashi mejora su habilidad con la espada y derrota a una gran cantidad de adversarios; sin embargo, se da cuenta de que aún está muy lejos del nivel espiritual de sus maestros y de Sekishusai.
El siguiente reto en la senda del joven guerrero es Baiken Shishido, maestro de la kusarigama. Por su parte, Matahachi sufrirá una terrible pérdida, consecuencia de asumir un tÃtulo que no merece.