La sosegada tranquilidad de una pequeña aldea japonesa se ve perturbada cuando hallan cerca de un lago el cuerpo cercenado de una joven estudiante, Mako Igarashi.
La gente está inquieta y se siente insegura sabiendo que todavía anda un asesino a sus anchas, pero Mizuki Aikawa, una compañera de clase, ¡se declara culpable del asesinato!
Sin embargo, a medida que relata los hechos, la policía se percata de que aún hay cabos sin atar y es posible que Mizuki esté encubriendo a alguien más… Pero, ¿qué motivo tendría para hacerlo?